Hoy 26 de Septiembre la Iglesia Universal celebra la 107 Jornada Mundial del Migrante y el Refugiado, momento propicio para orar y cooperar en favor de nuestros hermanos que se encuentran en esta difícil situación al rededor del mundo. En esta oportunidad el Papa Francisco nos invita a pensar y trabajar «Hacia un nosotros cada vez más grande».
«La Iglesia está llamada a salir a las calles de las periferias existenciales para curar a quien está herido y buscar a quien està perdido, sin prejuicios o miedos, sin proselitismo, pero dispuesta a ensanchar el espacio de su tienda para acoger a todos. Entre los habitantes de las periferias encontraremos a muchos migrantes y refugiados, desplazados y victimas de la trata, a quienes el Señor quiere que se les manifieste su amor y que se les anuncie su salvación. Los flujos migratorios contemporaneos constituyen una nueva «frontera» misionera, una ocasión privilegiada para anunciar a Jesucristo y su Evangelio sin moverse del propio ambiente, de dar un testimonio concreto de la fe cristiana en la caridad y en el profundo respeto por otras expresiones religiosas. El encuentro con los migrantes y refugiados de otras confesiones y religiones es un terreno fértil para el desarrollo de un diálogo ecuménico e interreligioso sincero y enriquecedor»» (Discurso a los Responsables Nacionales de la Pastoral de Migraciones, 22 de septiembre de 2017).
Desde Cáritas Carúpano compartimos la experiencia con tantos hermanos vulnerables que sufren la migración forzada y muchas otras calamidades que se viven a través de la frontera maritima de Güiria con Trinidad y Tobago. Agradecemos a Dios por el servicio que prestan los voluntarios del Equipo de Cáritas Parroquial Inmaculada Concepción en nuestra Casa de Paso San Antonio que funciona en Güiria, Municipio Valdés, y que ha beneficiado a muchos en diferentes circunstancias.
Es nuestro deber ejercer la acción social de la Iglesia Católica a través de la Pastoral de Movilidad Humana y acompañar a los migrantes y víctimas de Trata, Violencia y demás delitos relacionados con esta realidad; siempre contando con el apoyo de otras instituciones y organizaciones, como es el caso de las alianzas establecidas con OIM, ACNUR, UNICEF, entre otras que nos ayudan a brindar una atención integral a víctimas directas y familiares dejados atrás.
Nos unimos en oración por todas las víctimas fatales que ha dejado la situación migratoria en nuestro país y el mundo entero; nos unimos a la intención del Papá Francisco de «esforzarnos todos y derribar los muros»; mantenemos nuestro compromiso de dignificar la vida de cada migrante y refugiado para acercarlos al Amor de Dios en medio de su realidad.