Con miras a seguir avanzando en la evangelización en medio de las comunidades más necesitadas de la Península de Paria, una pequeña representación de la Diócesis de Carúpano se dirigió el pasado martes 18 Enero a Macuro para la instalación de un nuevo comedor nutricional para niños en esta apartada localidad.

Mons. Jaime Villarroel, Obispo de la Diócesis de Carúpano, encabezó la misión: celebró la Eucaristía y junto a representes de la Caritas Diocesana realizó una visita por las calles de la comunidad, compartiendo desde la vivencia cercana parte de la historia y la fe de estos hermanos.

La jornada logró atender a la mayoría de la población infantil, se le aplicó la medición antropométricas a 220 niños, estudiando las necesidades de cada caso. La Reliquia del Beato José Gregorio Hernández también fue parte de la visita, compartiendo así un poco de esperanza en medio de la devoción al «médico de los pobres».